Por Adolfo Fuentes, Segundo año, Ingeniería Comercial Plan Común.
Chile es un país ubicado en América del sur, específicamente en el cono sur. Tiene, como forma de gobierno, una república presidencialista y para administrarse se subdivide en 15 regiones. Cada región tiene que cumplir (entre otros) con tener una cantidad determinada de habitantes y poseer actividades económicas suficientes para poder sustentar el gobierno regional.
Pero, que todas las regiones cumplan estos requisitos, no significa que estas sean iguales entre sí. Pues, por lo general, cada una está enfocada a una función o territorio especifico, a modo de ejemplo, hay una región que actúa como capital y posee el palacio de gobierno, otra que tiene el congreso y la isla de pascua, otra que tiene las minas de cobre, otra que tiene grandes recursos naturales y otras que incluso reclaman un espacio en la Antártida. También, por supuesto, (y muy relacionado con el territorio) estas regiones se especializan en algún sector de la economía (primario, secundario o terciario) y sus ingresos están estrechamente relacionados con la actividad que realicen.
Así, y hablando en términos sencillos, podemos decir que los recursos de una región dependen de su actividad económica y de los impuestos, que están muy relacionados con la cantidad de habitantes. Por lo tanto, cada región procura realizar mejor sus actividades para así crecer y desarrollarse, con el objetivo de ser un lugar mejor para sus habitantes, importando poco o muy poco (excepto casos de emergencia) la situación de las regiones vecinas.
¿Suena bien, verdad?, pues nunca he visto (para dejar claro) a un intendente que diga que la región de al lado posee muchos recursos y debiera compartirlos con otras regiones con menos, pues no sería justo (no digo si fuese correcto o no), ya que esa región con sus propios habitantes ha sido capaz de producir esa situación. Advierto al lector que, si este análisis no le parece correcto, mejor no continúe leyendo, ya que su mente y mi integridad física pudiesen salir dañadas.
Ahora, hagamos este mismo análisis desde el punto de vista de la Universidad de Chile. La Universidad es una casa de estudios de educación superior, que imparte 67 carreras y que para administrarse se divide en una Casa Central (que actúa como capital), 14 Facultades y 4 Institutos.
Dentro de las Facultades (que a su vez se forman por Escuelas) está la infame Facultad de Economía y Negocios, o FEN. Esta Facultad, ha ganado su infamia debido principalmente a dos cosas, su fuerte pensamiento neoliberal y los recursos con los que dispone, entre los que se encuentran, por ejemplo, el Tecnoaulas[1] (parte principal de la infraestructura) cuyos pasillos cuentan con plasmas que avisan las clases , y cuyas salas tienen aire acondicionado y al menos un proyector. En el análisis siguiente, solo voy a desmenuzar su infamia, desde el punto de vista de los recursos, ya que no es del interés de este artículo debatir sobre el pensamiento neoliberal.
Ahora si seguimos la lógica del proceso anterior (con las regiones), veremos que las funciones que realiza FEN le dan espacio para poder generar esta cantidad recursos, funciones que se ven apoyadas por su cantidad de estudiantes. En este término basta ver que los 500 mechones[2] que entraron a FEN pueden ser, por ejemplo, la misma cantidad (seguramente un tanto menos) de estudiantes totales que hay en la Facultad de Artes[3]. Si esto fuera así y suponiendo que los aranceles de la FEN sean el doble que los de Artes (aprox.[4]), vemos que todo el dinero lo que recibe Artes equivale a solo una fracción menor de lo que recibe FEN, solo por concepto de cantidad de estudiantes. Por lo tanto, es obvio que alguien que estudia en Artes va a tener una Facultad que cuenta con menos recursos que Beauchef o Derecho, Facultades que tienen una cantidad similar de alumnos que FEN y que por no tener un edificio nuevo o plasmas en los pasillos, no demuestran los recursos que en realidad poseen.
El punto es me gustaría decir (totalmente en buena y sin intención de generar conflicto), a los alumnos de otras facultades que al manifestar su opinión al respecto de FEN (Facultad que no es perfecta), primero vean lo que pagamos, cuántos somos y que hacemos, y quizás entiendan porque tenemos la infraestructura de la cual gozamos. Y aclarar que el hecho que nosotros tengamos el Tecnoaulas y todas las cosas que incluye, no es porque se las hayamos quitado a ellos de fondos que reparten de alguna manera, sino, simplemente por una cosa de gestión.
Ahora quisiera enfatizar el tema de la gestión, pues el Tecnoaulas fue construido con el dinero de donaciones de empresas, de particulares y con los aranceles. Dinero que se consiguió gracias al acto de moverse y convencer a las empresas por parte de las autoridades de FEN. Además me gustaría aclarar (por si a caso), de que no estoy a favor de que en Artes tengan una Facultad con problemas o que no haya dinero para pianos[5] , sino por el contrario, creo que se merecen una facultad digna (o mejor dicho de calidad) a la altura de su arancel, ya que si bien aunque pagan menos, también son menos, por lo tanto encuentro justo que tengan un Tecnoaulas a su medida. Todo esto proviniendo de una buena administración y un compromiso constante de las autoridades por mejorar el bienestar de sus estudiantes, que no es pedir nada espectacular, sino lo que corresponde.
Por otro lado me gustaría decir a los estudiantes de FEN que no debemos sentirnos mal, ni mucho menos, de estar estudiando en FEN, ya que tenemos lo que corresponde y no debemos caer en la actitud cínica de hablar mal de la Infraestructura de la Facultad, y luego al estar en una clase ir cómodamente al termostato a cambiar la temperatura de la sala, porque hace calor o frío.
Con todo esto dicho, y habiendo hecho lo posible para dejar claro, cuando lo que mencioné es un hecho y cuando una opinión, me gustaría invitarlos por una sola vez a que debatan esto y que se creen una opinión al respecto sobre lo que este infame escritor invisible les ha dicho. Les aseguro que no les hará mal, ya que no generará enfermedades ni síndromes, pues solo pensaran un tiempo y tendrán un poco de tema para el almuerzo, para pensar en la ventana si se encuentran solos o simplemente no quieren estudiar. Demás está decir que cualquier crítica u opinión, tanto adversa como favorable, puede ser enviada a nuestro correo en forma de carta al director, o bien, escrita abajo en forma de comentario.
[1] Si no conoces FEN, te invito a ver las infames imágenes en “Tour Virtual FEN” http://fen.uchile.cl/uchile.portal?_nfpb=true&_pageLabel=fac
[2] Por si alguien no lo notó existen 10 secciones de Álgebra I.
[3] Menciono esta Facultad a modo de ejemplo, no tengo nada en contra de la Facultad de Artes.
[5] Comentario hecho por un estudiante de Artes a nuestra revista.